En esta actividad relacionamos los social y lo literario. Durante la dictadura militar (1979-1983) muchos libros fueron prohibidos.
Video sobre Libros prohibidos durante la dictadura militar: https://youtu.be/mWkTwmPR_vc
● Actividades:
- Antes de ver el video - "Censura Cultural"
Se le puede preguntar a los chicos y las chicas con qué creen que tiene que ver. Es importante hacerles notar la fecha. Si no la encuentran se las puede decir la o el docente (miércoles 15 de septiembre de 1976). Se puede reparar también en que ese año es el mismo que nombra el texto de Graciela Montes leído con anterioridad.
La publicación fue hecha el año de inicio del golpe, en el diario La Nación. Se buscaba que toda la población estuviera al tanto de la medida lanzada por decreto por los militares. La gente en sus casas tuvo que esconder, enterrar o quemar los libros que no cumplían con las reglas militares. En las escuelas se prohibieron muchas lecturas y los autores y autoras de esos libros en particular fueron perseguidos y censurados.
Después de que comenten de qué creen que se trata la nota del periódico, las y los docentes pueden ayudar a concluir que tiene que ver con la censura cultural vivida durante la dictadura y en particular con los cuentos prohibidos para niños y niñas. La idea es recuperar si conocen alguno/a, preguntarles si en algún grado ya leyeron algún cuento prohibido.
Llegado este punto el o la docente podrá comentar acerca de la censura cultural y mostrar el video.
* A su vez, es interesante no olvidar que hubo resistencias: docentes que ingresaban los libros prohibidos al aula forrados con otro papel para que no pudieran identificarse los títulos, canciones que en sus letras hablaban metafóricamente de lo que ocurría, etc. Es clave también hacer la aclaración de que ahora que estamos en democracia estos libros ya no están más prohibidos y todas y todos los podemos conocer y leer.
Algunos títulos posibles:
"El caso Gaspar", de Elsa Bornemann
"La planta de Bartolo", de Laura Devetach
"El pueblo que no quería ser gris", de Beatriz Doumerc
"Un elefante ocupa mucho espacio", de Elsa Bornemann
"La torre de cubos", de Laura Devetach
- Intercambios post lectura:
Les dejamos, a modo de ejemplo, preguntas posibles para hacer luego de las lecturas de algunos de los cuentos:
‘‘El caso Gaspar’’
• ¿Qué pasa en esta historia?
• ¿Por qué habrá estado prohibido este cuento cuando gobernaban los militares?
• ¿Qué creen que habrá querido decir Gaspar cuando dice “Me rechazan porque soy el primero que se atreve a cambiar la costumbre de marchar sobre las piernas… Si supieran qué distinto se ve el mundo de esta manera, me imitarían…”?
‘‘La planta de Bartolo’’
• ¿Qué pasa en esta historia?
• ¿Qué tenía esta planta de especial, de particular?
• ¿Qué intenciones tenía Bartolo?
• ¿Por qué interviene la policía?, ¿por qué a la policía le molestaba lo que hacía Bartolo?
• ¿Qué les pasa a los chicos y las chicas con esta situación?
• ¿Qué deciden hacer?
• ¿Por qué habrá estado prohibido este cuento por la dictadura?
• ¿Por qué creen que los militares no querrían que se lean estos cuentos en las escuelas y en las casas?
‘‘El pueblo que no quería ser gris’’
• ¿Qué pasa en esta historia?
• ¿Qué decía el rey?
• ¿Qué piensan que pasaría en otros pueblos?
• ¿Por qué piensan que los militares no querían que se leyeran estos cuentos en las escuelas o en las casas?
- Lectura de un cuento prohibido
a) Lectura: La actividad entonces ahora será escuchar la lectura de un cuento prohibido. La idea sería que estén atentos y atentas a la historia e invitarlos e invitarlas a pensar qué valores o ideas promueven los cuentos que para los militares justificaron su censura.
Hay muchos cuentos prohibidos posibles para este momento de la secuencia. La o el docente podrá elegir cuál leer en función del que le parezca más adecuado para el grado, o teniendo en cuenta que quizás algunos de los títulos los chicos y chicas ya los conozcan.
Todos ellos, escritos por autores y autoras tanto de Argentina como de otros países, relataban situaciones de protesta, de reclamo frente a las injusticias y de acciones conjuntas que llevaban a la libertad.
- A modo de reflexión - Podemos leer esta carta de Graciela Montes sobre la dictadura militar y hacer una reflexión sobre por qué debemos recordar este período de la historia de Argentina y no, olvidarlo.
El golpe y los chicos, por Graciela Montes
Algunas personas piensan que de las cosas malas y tristes es mejor olvidarse. Otras personas creemos que recordar es bueno; que hay cosas malas y tristes que, si no van a volver a suceder; es precisamente por eso por lo que nos acordamos de ellas, porque no las echamos fuera de nuestra memoria.
Es el caso de la historia que vamos a contar aquí, algo que pasó en nuestro país hace ya veinticinco años (*), cuando todos éramos más jóvenes y muchos de los que están leyendo estas páginas ni siquiera habían nacido.
No es una historia fácil de contar porque nosotros mismos fuimos protagonistas, porque lo que pasó nos pasó a nosotros y no a otras personas, porque son cosas que vimos con nuestros ojos, que vivimos en nuestro cuerpo.
El 24 de marzo de 1976 hubo un golpe de Estado.
Un golpe de Estado es eso: una trompada a la democracia. Un grupo de personas, que tienen el poder de las armas, ocupan por la fuerza el gobierno de un país.Toman presos a todos: al Presidente, a los diputados, a los senadores, a los gobernadores, a los representantes que el pueblo había elegido con su voto, y ocupan su lugar. Se convierten en dictadores. (…) Se sienten poderosos y gobiernan sin rendirle cuenta a nadie.
(…)
Como militares que eran lo militarizaron todo e hicieron que los civiles nos sintiéramos reclutas. El país entero se convirtió en un gran cuartel, y en los cuarteles, ya se sabe, hay mucho grito y poca oreja: órdenes, consignas, y la sociedad, calladita, obediente, y sin poder hacerse oír. Más que gobernar mandaban, decretaban, vigilaban, censuraban, acallaban, recortaban, uniformaban todo.
* Cuando la autora lo escribió, habían pasado 25 años. Hoy, en el año 2020, han pasado ya 44 años desde 1976. Montes, G. (1996). El golpe y los chicos. Buenos Aires: Gramón-Colihue